Descripción:  

Arbustillo pequeño, de entre 10 y 20 cm de altura, muy ramificado y de follaje compacto y grisáceo. El margen lo tienen enrollado y el envés está recubierto de una fina pelosidad. Entre los meses de abril y julio aparecen las flores en ramilletes redondeados o alargados, de color blanco o rosado; cada una de estas flores tiene el cáliz aterciopelado y la corola externamente vellosa, suavemente bilabiada, con el labio superior entero o emerginado y el inferior trilobulado.

Hábitat:  

El tomillo crece normalmente en zonas rocosas o en ribazos secos. Forma parte de un extenso matorral junto con el romero (Rosmarinus officinalis), el cisto (Cistus clusii) y otras. También se le encuentra en algunos lugares muy abiertos o entre pastizales.

Usos:  

El tomillo es una planta aromática empleada normalmente con fines culinarios. De él se obtiene un aceite esencial rico en timol, que es muy útil en la fabricación de perfumes y jabones, así como en medicina debido a sus propiedades antisépticas. Las infusiones de tomillo también se emplean como tónico digestivo para facilitar la digestión, expulsar las lombrices intestinales, contra la tos convulsiva, como repelente de mosquitos y laxante suave. Mezclado con romero y espliego y disuelto posteriormente en alcohol se consigue una magnífica loción tonificante para añadir al agua del baño.